lunes, 28 de marzo de 2011

Cogito ergo sum

Pienso, luego existo. Más aún no me lo permiten.

sábado, 5 de marzo de 2011

Los ojos que nunca te vieron

Qué triste es saber que tus ojos son ajenos a mi camino, que triste es saber que la felicidad puede serte otorgada y al mismo tiempo puedo caer en la desgracia.


Qué bello es no verte y saber que existes. Que increíble es saber que existe la ínfima posibilidad de verte. Qué bueno es bramar al cielo por ti.


Qué bueno y bello es todo esto; porque jamás tendré esos ojos; esos ojos pobres, ignorantes y vacios; que jamás han sabido de ti.